
Ya estamos al final de estos 21 días de meditaciones… cerrando este ciclo corto que ha durado 13 lunas, una vuelta al Sol llena de aprendizajes que van asentando a medida que meditamos en ellos.
Hoy, el sol está a una mayor distancia angular negativa del ecuador celeste, está más lejos de lo que estará durante todo el año. En las tradiciones antiguas, tanto del Sur como del Norte, esta noche, es la noche más larga, aquella que esperamos pacientes toda la noche para que el Sol renazca y nos traiga nuevamente su luz.
Cada año, nosotros también estamos re-naciendo, recibiendo una nueva oportunidad para ordenar nuestra vida y para equilibrar nuestra energía femenina-masculina.
Solsticio… el nacimiento de lo masculino
El Sol desde la cosmovisión andina y amawtica, es la representación de lo masculino en perfecto equilibrio. Es la energía que se expande, fecunda, ilumina a nuestra madre tierra y a todos sus hijos, es la representación masculina de «Dios» que está en perfecto equilibrio con la Tierra.
El Solsticio, es este tiempo, de ir hacia adentro hacia nuestra oscuridad, hacia nuestra sombra, ir al lugar más alejado de nuestro sol interior para volver/retornar hacia nosotros mismos.
Y qué hay en esa sombra?, pues mucho de lo que hay son las heridas que tenemos de nuestros arquetipos femenino/masculino.
Para nosotras las mujeres lo femenino se expresa cada mes con la energía lunar y menstrual, nos recuerda la importancia de sanar y re-equilibrarnos. Pero es en este tiempo solar.. que nuestra energía y potencia masculina, necesita activarse con el movimiento solar. Con el movimiento cíclico y solar se activa nuestra energía masculina y nos mueve para re-estructurarse.
Para equilibrar nuestro femenino.. tenemos que equilibrar nuestro masculino y viceversa.
Estamos buscando continuamente la sanación de las heridas femeninas, de nuestro pasado femenino, del dolor que habita en nuestro cuerpo femenino. Pero para completar ese camino, para sanar en equilibrio necesitamos también conectar con lo masculino y con las heridas masculinas que llevamos dentro.
Y dónde están esas heridas? cómo se manifiestan?… A veces caemos en el error de pensar que por ser mujeres, los hombres no sufren lo suyo y al polarizarnos, nos ponemos en el lugar de víctimas y a ellos en el lugar de culpables, sin darnos cuenta que en toda relación hay una co-responsabilidad. Por más duro que esto suene. Nuestros patrones ancestrales masculinos y femeninos se manifiestan en nuestros actos inconscientes.
Así, tenemos dentro un «papel» y un «rol categórico» para los hombres y las mujeres. Pero por experiencia, hay muchas mujeres que viven su vida desde su masculino más potente y muchos hombres que viven desde su feminidad.
Sanando a los «hombres» de nuestra vida
Nuestro masculino interno: Para sanar, para equilibrarnos, necesitamos conectar y conocer ese masculino que habita dentro de nosotros, dar luz, traer a la consciencia a nuestro hombre interno, a nuestro lado masculino y escucharlo, sentir a nuestro niño, nuestro abuelo interno… ¿cómo es?, ¿cómo está? ¿cómo y en qué situaciones se expresa?
Los «hombres» de nuestro árbol: Hemos recibido de nuestros abuelos, padres, tíos, hermanos, de nuestro árbol masculino toda esa influencia de vida, de sufrimiento, de dolor…. pues no solo heredamos los dolores de lo femenino, sino que nuestra mente, nuestros patrones en nuestro arquetipo, duerme también esa memoria masculina ancestral… ¿Cómo son? ¿Qué vivencias han tenido que me afectan? ¿Qué he aprendido? ¿Cómo me llegan sus vivencias? ¿Cuales son las heridas que arrastran?
Revisar nuestros contratos: A veces, vivimos sujetos a frases que se quedan en la familia como una norma inamovible, un «los hombres no hacen nada en casa», «los hombres tienen que ser fuertes y no llorar», «todos los hombres son maltratadores», «los hombres son infieles»,etc. esas frases que repetía la abuela, luego nuestra madre, o bien otras mujeres de nuestra familia, constituyen un contrato familiar para que tanto mujeres como hombres asuman que «es así», entonces encontramos que nuestros hermanos cumplen ese contrato, esas condiciones para se parte del clan, de la familia… y a la vez nosotras buscamos hombres que cumplan con esas condiciones.
Revisar las relaciones con nuestra figura paterna: Ya sea nuestro padre, algún tío, o incluso nuestra madre quien haya cubierto la figura paterna, necesitamos revisar cúal ha sido su influencia en nuestra vida, ser conscientes de lo que hemos recibido como información para nuestras relaciones, sanar todo aquello que esté a nuestro alcance!
Revisar las relaciones con los hombres de nuestra vida: Nuestra pareja, nuestros hermanos, nuestros hijos, nuestros nietos, nuestros jefes… inclusive todas las parejas que tuvimos… ¿Cómo fue/es esa relación?… ¿hay cosas que repetimos sin cuestionar?… ¿vivimos etiquetando? ¿qué se repite?, etc.
Nuevo Sol y nueva masculinidad
Es Solsticio… esta madrugada, el Sol se elevará por encima de las montañas, por encima del mar, de los árboles, de la ciudad… Nos hemos alejado del sol, hemos ido hacia el extremo más lejano para reconocer quienes somos, y es tiempo de volver.
Somos seres cíclicos, nuestros aprendizajes también lo son.. y cada año, cada ciclo que se inicia tenemos una nueva oportunidad de sanar, de elevar nuestra consciencia, de sanar nuestras relaciones.
Y en este tiempo, con tanto movimiento energético que estamos viviendo, necesitamos sanar por dentro… replantear nuevas formas de vivir, ser el ejemplo que necesita la humanidad, vivir expresando lo que sentimos, lo que pensamos, lo que somos realmente, auténticamente!
Y necesitamos una nueva masculinidad que pueda expresarse desde el amor… desde la sabiduría… necesitamos sanar esa masculinidad en nosotros, hombres, mujeres… etc. para dar paso a que lo femenino también pueda sanar y pueda expresarse.
Ese es el futuro de la humanidad… el equilibrio… y no hay que perderlo de vista!
20 de Diciembre de 2017
21 DÍAS de preparación para el SOLSTICIO
“meditaciones, mensajes, canalizaciones y sueños”
Jallalla!!!
Warawara Neila Marquina
Sacerdotisa de la Pachamama (Madre Tierra)
Sabiduría Amawtica Femenina para el nuevo tiempo
Lecturas complementarias: Al encuentro con lo masculino. // Encontrar pareja un camino de consciencia y sanación