«Que este rezo nos unifque, nos permita entrelazarnos.
Hemos pedido a la mamita que aún sin poder hacerlo presencialmente, podamos poner nuestra palabra y unirnos desde el corazón, desde nuestros altares y nuestros corazones.
Es un tiempo que nos llama a sostenernos, para saber que podemos ser luz en este tiempo, sin temor a mirar nuestra sombra. Podemos desde nuestro espacio, nuestro lugar activar una red invisible un tejido como hacen las arañas y a veces ni se ve, no se percibe, pero que existe y está ahí.
Y que en este tejido que construyamos hoy prendamos una lucecita, un rezo muy especial por todas esas almas en este tiempo les está tocando retornar a las estrellas, puedan terminar su misión en esta tierra, para que en ese puente que une la tierra y el cielo encuentren su camino a la luz, en paz
Que más allá del dolor del sufrimiento, qué supone para las personas que quedamos aquí, para quienes quedamos en esta tierra y en muchas circunstancias no nos estamos pudiendo despedir de la forma que cada uno necesita para hacer su tránsito y su vuelo sepan y sepamos todos que muchas, muchos corazones vibrantes que están pidiendo por su calma por su paz, por su amor, este dolor se convierte en sufrimiento.
Que podamos todas pedir desde lo más profundo de nuestro corazón que se abra este ese puente lleno de luz a través del cual, almas pueden ascender y encontrar su lugar lentamente abrimos nuestros ojos retornando aquí a esta tierra a este plano existente.
Recordando que la vida es un soplido, como dice Amawta Fernando, es oro líquido y oro en polvo que se nos escurre entre los dedos y que nos sirva este tiempo aún siendo tan duro para una reflexión profunda sobre ¿cómo queremos vivir nuestra vida?, A qué le vamos a dar importancia?, qué es lo esencial?, cuál es el desafío que nos toca como mujeres en este warmi pachakuti?
Nos ponemos al servicio de la luz, de la madre y permitirnos conectar con todos los dones, que tenemos para ponernos a disposiución de la luz. Hoy que los altares florezcan y nuestros corazones sientan la caricia suave de la Madre Tierra «
Awicha Awilulu – María Constanza Videla Jauregui
Compartimos contigo, esta reflexión, mensaje sobre el altar, los cuatro elementos y la forma en que podemos equilibrar nuestra vida a través de la ritualidad personal.
A la vez que también compartimos este rezo que nos permite conectar con el espíritu sagrado de la Madre Tierra, desde el Amawtismo Tiwanakota.
Acompaña y guía: Awicha Awilulu y Warawara.